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Balaenoptera physalus

Reino: Animal; Filo: Chordata; Subfilo: Vertebrata; Superclase: Gnathostomata; Superclase: ? Tetrapoda; Clase: Mammalia; Subclase: ? Theria; Orden: Cetartiodactyla; Suborden: Cetancodonta; Infraorden: Cetacea; Superfamilia: Mysticeti; Familia: Balaenopteridae

Balaenoptera physalus (Linnaeus, 1758)

Rorcual común

SITUACIÓN: Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas: categoría “Vulnerable”

SINÓNIMOS: Balaena antipodarum Tomilin, 1957; Balaena antiquorum Fischer, 1829; Balaena boops Linnaeus, 1758; Balaena maximus borealis Knox, 1838; Balaena mysticetus major Kerr, 1792; Balaena physalis Kerr, 1792; Balaena physalus Linnaeus, 1758; Balaena quoyi Fischer, 1829 (synonym); Balaenoptera antarctica Gray, 1846 (synonym); Balaenoptera aragous Farines & Carcasonne, 1829; Balaenoptera australis Gray, 1846; Balaenoptera blythii Anderson, 1879; Balaenoptera brasiliensis Gray, 1846; Balaenoptera gibbar Lacépède, 1804; Balaenoptera mediterraneensis Lesson, 1828; Balaenoptera mediterranensis Cabrera, 1961; Balaenoptera musculus Van Beneden & Gervais, 1880; Balaenoptera patachonica Lahille, 1905; Balaenoptera patachonicus Burmeister, 1865; Balaenoptera patagonica Dabbene, 1902; Balaenoptera quoyii Lonnberg, 1906; Balaenoptera rorqual Lacépède, 1804; Balaenoptera sulcata arctica Schlegel, 1841; Balaenoptera swinhoii Gray, 1866; Balaenoptera tenuirostris Sweeting, 1840; Balaenoptera velifera copei Elliot, 1901; Balaenopteris guibusdam Tomilin, 1957; Benedenia knoxii Gray, 1864; Dubertus rhodinsulensis Tomilin, 1957; Physalis vulgaris Fleming, 1828; Physalus antarcticus Gray, 1850; Physalus australis Gray, 1850; Physalus brasiliensis Gray, 1850; Physalus dugundii Heddle, 1856; Physalus fasciatus Gray, 1850; Physalus patachonicus Burmeister, 1866; Physalus verus Billberg, 1828; Pterobalaena communis Van Beneden, 1857; Pterobalaena gigantea michrochira Barkos, 1862; Rorqualus musculus F. Cuvier, 1836; Sibbaldius tectirostris Cope, 1869; Sibbaldius tuberosus Cope, 1869; Swinhoia chinensis Gray, 1868 

El nombre genérico Balaenoptera significa “ballena alada”. El nombre específico physalus, se ha traducido de varias formas, como “fuelle” o como “sapo que se infla”, por los surcos de la garganta que se dilatan cuando se alimenta.
El rorcual común (Balaenoptera physalus (Linnaeus, 1758), es el único cetáceo misticeto observado frecuentemente en las costas del Mar de Alborán. Es el segundo animal más grande del mundo después del rorcual azul (Balaenoptera musculus (Linnaeus, 1758) con el que a veces puede confudirse además de con otros rorcuales como el rorcual norteño y el rorcual tropical. Las hembras miden entre un 5 y 10% más que los machos (Gambell, 1985) y en el hemisferio sur, la longitud corporal promedio de los adultos es algo mayor que las longitudes observadas en individuos del hemisferio norte (Aguilar, 2002).

Descripción morfológica:
El cuerpo es alargado, muy aerodinámico y de coloración uniforme gris plata o gris oscuro por el dorso y los costados mientras que el vientre es blanco o color crema. Presenta entre 56-100 surcos o pliegues gulares en la garganta que generalmente acaban en el ombligo o detrás de él.

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Su identificación, al igual que con otros misticetos, se realiza gracias a la observación de su aleta dorsal y al soplo, pero además esta especie presenta un peculiar carácter distintivo, la pigmentación asimétrica de su cabeza. Las barbas y la mandíbula inferior derecha la son de color gris oscuro, sin embargo, la parte inferior derecha de sus cabezas junto con las barbas de la parte anterior derecha son de color blanco. Esta asimetría puede ser muy intensa y a veces el color blanco del lado derecho de su cabeza puede continuar hasta el labio superior (Kiefner, R. 2002). La cabeza representa aproximadamente 1/4 de la longitud del cuerpo y el hocico es estrecho y apuntado. La mayoría de los ejemplares presentan una única cresta o pliegue longitudinal bien definido que se extiende desde la punta del hocico hasta los espiráculos.

Comportamiento:
Los misticetos son mamíferos marinos altamente aerodinámicos que han desarrollado una estrategia locomotora eficiente (Williams 1999), que permite la natación a alta velocidad y la migración a larga distancia. El hecho de que figuren entre los misticetos más veloces propició que los balleneros la apodaran como “galgos de los mares” (Kiefner, 2002).
El soplo, con forma de columna alta, suele medir entre 4-6 m, aunque a veces puede ser incluso algo mayor. Para salir a respirar, la secuencia de inmersión generalmente consiste en sacar primero la cabeza, seguidamente sopla (entre 2 y 5 veces a intervalos de unos 10-20 segundos) mientras el dorso va emergiendo del agua pudiendo verse el lado derecho blanco. Seguidamente puede verse la aleta dorsal y el arqueamiento del pedúnculo caudal antes de sumergirse de nuevo. La aleta caudal en esta especie normalmente no se observa durante la secuencia de inmersión. Si el animal va a iniciar una inmersión profunda, arquea mucho el pedúnculo caudal. Las inmersiones suelen durar entre 5 y 15 minutos, aunque a veces puede permanecer sumergido más tiempo (Cawardine, 1995). Las inmersiones de alimentación son más profundas y de mayor duración que las inmersiones realizadas mientras se desplaza y, generalmente son buzos más profundos que los rorcuales azules y sei.
Se comunican emitiendo pulsos de 20Hz, que pueden oírse a más de cien kilómetros de distancia dentro del agua. Igual que ocurre con las ballenas jorobadas (Megaptera novaeangliae) (Glockner-Ferrari DA & Ferrari MJ., 1985), también son los machos en esta especie los que emiten canciones y la función biológica asumida de la canción es atraer a las hembras para aparearse y/o competir con los rivales machos por el acceso a hembras receptivas (Croll et al., 2002; Oleson et al., 2014). Las canciones emitidas por los machos de rorcual común consisten en combinaciones repetidas de unos pocos sonidos discretos, de frecuencia modulada y constante, el más común de los cuales a menudo se conoce como la nota o pulso '20 Hz (Watkins et al., 1987). Se ha podido observar que a medida que estos individuos nadan más rápido, pasan menos tiempo cantando y la duración de sus canciones disminuye (Clark et al., 2019).

Alimentación y Reproducción:
En general, la alimentación por filtración en cetáceos misticetos permite a estos animales procesar grandes cantidades de presas a una escala proporcional a su tamaño corporal relativamente grande (Sanderson y Wassersug, 1993; Werth 2000).
Los rorcuales se distinguen de las verdaderas ballenas entre otras cosas, por su comportamiento de alimentación “por estocada o embestida”, un proceso biomecánico extraordinario en el que grandes cantidades de agua y presas son engullidas y filtradas (Brodie, 1993; Pivorunas, 1979; Werth, 2000). Este modo de alimentación intermitente requiere que la ballena use la inercia del cuerpo para estirar su cavidad bucal alrededor de un volumen de agua cargada de presas (Orton y Brodie, 1987) y es energéticamente costosa lo cual limita la duración máxima de la inmersión (Acevedo-Gutiérrez et al., 2002).
Al rorcual común le gusta ponerse de costado mientras se alimenta. Aún no se ha encontrado una explicación para este comportamiento, pero podría estar relacionado con la coloración asimétrica de su cabeza (Kiefner, 2002).
Aunque su dieta es variada, en el Mar Mediterráneo, así como en el centro y este del Atlántico Norte, la presa de estos grandes mamíferos es fundamentalmente el krill del norte (Meganyctiphanes norvegica). Otros integrantes de su dieta pueden ser especies de peces que forman bancos como arenques, capelines y caballas, entre otras, así como pequeños calamares y crustáceos (Kiefner, 2002).


El comportamiento reproductivo de esta especie es poco conocido (Lockyer, 1984). La madurez sexual se alcanza a una longitud aproximada de 17.5 - 19 m (6- 7 años) en machos y 18.5 - 20 m (7-8 años) en hembras en el hemisferio norte y sur respectivamente. En el hemisferio norte, el período de apareamiento es de diciembre a febrero, mientras que en el hemisferio sur es de mayo a julio. La gestación dura aproximadamente 11 meses, al final de los cuales nace una cría de aproximadamente 6–7 m de largo y con un peso de 1–1.5 toneladas métricas. Por lo general, solo se produce una cría por embarazo, y el destete ocurre cuando la cría tiene entre 6 y 7 meses de edad y mide entre 11 y 13 m de longitud (Aguilar, 2002). Las hembras dan a luz cada 2-3 años a una sola cría. Aunque se han encontrado gemelos en el interior del útero de algunas hembras, no hay constancia de que ninguno haya sobrevivido (Reeves et al, 2002). Se estima que su longevidad es de 70-90 años.

Imágenes aéreas de una hembra con su cría en la costa del Garraf (EDMAKTUB/Estudio de cetáceos)

Distribución y Migración:
El rorcual común es una especie cosmopolita, que se distribuye desde el ecuador hasta las regiones polares, aunque parece estar ausente en las latitudes más extremas, cerca del límite de hielo. También está ausente en el Mar Negro y es muy raro en el Mediterráneo oriental, el Mar Báltico, el Golfo Pérsico, el Mar Rojo y en la mayoría de las regiones ecuatoriales. Las mayores concentraciones generalmente se encuentran en aguas templadas y frías (Aguilar, 2002).
La distribución y estructura de la población de los rorcuales comunes parece ser más compleja de lo que se pensaba. Sus patrones de migración no se ajustan a la migración estacional de otros misticetos que generalmente ocurren desde las zonas de alimentación de verano a las zonas de reproducción de invierno, ya que esta especie tiene movimientos más variados (Mizroch et al., 2009).
La presencia del rorcual común en el Mar Mediterráneo se remonta a la Antigüedad y es el único cetáceo misticeto que puede observarse cada año estacionalmente en esas aguas (Notabartolo di Sciara et al., 2003). La caza comercial intensiva de ballenas en aguas del Estrecho de Gibraltar y zonas aledañas durante la década de 1920, agotaron la abundancia local de esta especie de cetáceo y redujeron la población que migra entre el Atlántico y el Mediterráneo (Sanpera y Aguilar 1992; Palsbøll et al., 2004). Después de la moratoria internacional sobre la caza de ballenas impuesta por la CBI (Comisión Ballenera Internacional) en 1982 (que se hizo efectiva en la temporada 1985-1986), las poblaciones de rorcual común pudieron empezar a recuperarse lentamente (Aguilar, 2002).
Es uno de los cetáceos menos conocidos del Mediterráneo, debido a su distribución pelágica y a que suele encontrarse principalmente en aguas profundas. Están presentes en el Mediterráneo central y occidental, principalmente al norte y al este de las Islas Baleares, y parecen ser una mezcla de una población residente y una que migra entre el Mediterráneo y el Atlántico (Notabartolo di Sciara et al., 2016). Es una especie que suele desplazarse sola o en pequeños grupos, pero en las zonas de alimentación pueden formar agrupaciones más grandes, hasta 100 o más (Bannister, 2009). Realiza migraciones estacionales y como ocurre en otros misticetos, muestra diferentes estrategias de migración (Geijer et al., 2016). En el Estrecho de Gibraltar se observa que entre los meses de mayo a octubre (primavera-verano), realizan una migración occidental, hacia el Océano Atlántico y en los meses de otoño e invierno (de noviembre a marzo), realizan una migración oriental hacia el Mar Mediterráneo (Gauffier et al., 2018).
Diferentes estudios de distinta índole (genéticos, de contaminantes, de isótopos, etc.) (Berubé et al., 1998; Palsbøll et al., 2004; Giménez et al., 2013; Aguilar el al., 2002;), revelan la existencia de dos subpoblaciones, la Mediterránea (quizás extendiéndose al sur de Portugal (CBI, 1992, 2007 y 2009) y la Atlántica, aunque la conectividad entre ellas aún se está debatiendo (Das et al., 2017), por lo que la identidad de las ballenas observadas que cruzan el Estrecho de Gibraltar sigue siendo incierta (Castellote et al., 2012). La mayor parte de la información que se conoce sobre los rorcuales comunes, proviene de sus zonas de alimentación durante el verano, pero se sabe poco sobre las áreas donde pasan el invierno (Aguilar y García-Vernet, 2018).

Amenazas y Estado de Conservación:
La principal amenaza para esta especie de cetáceo en el Mediterráneo es la colisión con barcos de gran tonelaje (Laist et al. 2001, IWC 2018d). Otras amenazas existentes para esta especie son la contaminación acústica, provocada por el tráfico marítimo y/o exploraciones sísmicas (B. physalus es particularmente sensible a los sonidos de frecuencia baja y moderada, de aproximadamente 12Hz a 8 kHz (Richarson et al., 1995), así como la contaminación química debida a los altos niveles de contaminación por organoclorados que pueden influir negativamente en su capacidad reproductiva. La acumulación de microplásticos y otros contaminantes es otra causa de muerte para estos animales (Fossi et al., 2016). También pueden ser particularmente vulnerables al cambio climático que afecta la distribución de presas en su hábitat durante todo el año (Thomas et al., 2015) así como a los enredos en artes de pesca (Notarbartolo Di Sciara et al., 2016). Las capturas accidentales, aunque existen, a no suponen una amenaza para ellos. La orca es el único depredador natural conocido de esta especie, y probablemente sus crías sean las realmente vulnerables a este otro cetáceo, ya que los ejemplares adultos son demasiado grandes.
Anteriormente catalogada como “En Peligro”, el rorcual común a nivel mundial, se considera ahora como “Vulnerable”, ya que la población global de la especie casi se ha duplicado desde la década de los 1970. Esta recuperación se debe a las prohibiciones internacionales sobre la caza comercial de ballenas en el Pacífico Norte y en el Hemisferio Sur, vigentes desde 1976, así como a reducciones significativas en las capturas en el Atlántico Norte desde 1990. La subpoblación mediterránea se considera vulnerable . La especie figura en el Apéndice I de la Convención sobre Especies Migratorias (CMS). Las estimaciones de la población mundial son difíciles de obtener debido a la dispersión de la especie en los océanos abiertos que son difíciles de estudiar con los métodos tradicionales.
Los espacios marinos protegidos actualmente existentes del mar de Alborán, al ser costeros, no incluyen las áreas habituales de distribución de esta especie. El Lugar de Interés Comunitario (LIC) del Estrecho Oriental en el Estrecho de Gibraltar, recientemente creado, cubre parcialmente las áreas de importancia de esta especie en dicha zona durante sus movimientos migratorios.

VÍDEOS

25-12-2023 La Herradura

25-12-2023 La Herradura

 

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Chile

FOTOGRAFÍAS

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Ejemplar varado en las Islas Chafarinas

Ejemplar varado en las Islas Chafarinas
Rorcual aliblanco (Balaenoptera acutorostrata). Esqueleto montado dentro del proyecto Gigantes del Mar por la Fundación Museo del Mar de Ceuta. Montador Manolo García

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:
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- WIKIPEDIA

- WORMS

LILIANA OLAYA PONZONE