LA REPRODUCCIÓN
La mayoría de los peces presentan sexos separados durante todo su ciclo vital (reproducción gonocórica), pero también hay especies hermafroditas y partenogenéticas. El hermafroditismo puede ser simultáneo o secuencial, ya sea proterogino o proterándrico.
Un mero macho Epinephelus marginatus (hermafrotitas proteroginos) en busca de hembras. Cabo de Palos.
Las especies del género Serranus son hermafroditas simultáneas, pueden actuar como machos o hembras y se ha conseguido la autofecundación en cautividad de la cabrilla Serranus cabrilla. El hecho de ser territoriales y hermafroditas complica mucho su reproducción, lo que ha dado lugar a complejas danzas nupciales.
Danza nupcial de dos Serranus scriba
Hermafroditas proteroginos son, entre otros, los galanes o raones, Xyrichtys novacula, Nacen como hembras y algunas se transforman en machos, los cuales patrullan un territorio en el que viven varias hembras.
Un macho de galan patrulla su territorio.
Un caso particular de hermafroditismo proterogino es el que presentan las Julias Coris julis o los fredis Thalassoma pavo. Nacen hembras y machos primarios, que poseen tamaño y coloración similar y algunas hembras se transforman en machos terminales, aumentando de tamaño y cambiando a una coloración más llamativa. (hermafroditas proteroginos diándricos)
El periodo de reproducción de Thalassoma pavo tiene lugar durante el verano, momento en que los machos terminales forman harenes con numerosas hembras. Durante la reproducción, todo el grupo se desplaza hacia la superficie liberando alguna hembra los huevos, lo que aprovechan los machos primarios para intentar pasar desapercibidos entre las hembras y fecundar los óvulos, por lo que se ven continuas persecuciones del macho terminal sobre los primarios.
Reproducción de Thalassoma pavo
La dorada Sparus aurata y la salpa Sarpa salpa son hermafroditas proterándicos.
La partenogénesis se ha comprobado recientemente en varias especies de elasmobranquios, el primer caso conocido fue en un tiburón martillo y posteriormente en tiburones de puntas negras, tiburones cebra y en peces sierra. Un caso curioso de partenogénesis ocurre en los "molly Amazon", un pez óseo en los que sólo hay hembras. Se denomina ginogénesis, y en este caso es necesario la presencia del esperma de un macho de otras especies de molly, o incluso especies más lejanas, para inducir el desarrollo del huevo sin que participe su material genético.
La mayoría de los peces óseos son ovíparos, con fecundación externa (ovulíparos). Los huevos son expulsados al exterior y posteriormente fecundados. El número de huevos varía entre especies. Desde unos pocos de gran tamaño, depositados sobre el sustrato y con desarrollo directo, como en los chafarrocas (Lepadogaster candolii); hasta millones de huevos liberados en la columna de agua, como es el caso de los peces mula (Mola mola), donde una vez eclosionados pasan por diferentes estados larvarios antes de llegar a adultos. En el primer caso suele existir cuidado parental mientras que en el segundo los huevos quedan a su suerte.
El cuidado parental lo podemos observar en numerosas peces de nuestro litoral, como es el caso de los gobios.
El más fácil de ver, por la abundancia de esta especie, es el de la castañuela Chromis chromis. Tiene lugar a principios del verano, momento en que los machos bajan al fondo y limpian una pequeña superficie rocosa. Sobre ella intentan convencer a las hembras, mediante danzas nupciales, de que depositen allí sus huevos. Una vez que lo consiguen, cuidan y defienden la puesta hasta su eclosión.
Danza nupcial de castañuelas Chromis chromis
Macho de castañuela cuidando la puesta
Castañuela defendiendo la puesta
Los machos de salmonete real Apogon imberbis incuban los huevos en la boca, mientras que los de las difierentes especies tordos construyen nidos con algas o piedras, a los que atraen a la hembras para que realicen la puesta.
Nido de Symphodus rostratus
Symphodus cinereus ”adecentando" su nido
Nido de Symphodus ocellatus
Los machos de los caballitos y los peces pipa incuban la puesta en una bolsa. Las hembras les transfieren los huevos, siendo fecundados en el interior de la bolsa, permaneciendo dentro hasta que, mediante contracciones del progenitor, son expulsados al exterior pequeños juveniles.
Macho de Hippocampus guttulatus expulsando a su prole
En algunos peces óseos como Gambusia holbrooki, ovovivíparos, la fecundación es interna y de la madre nacen pequeños peces perfectamente formados.
La mayor variedad de tipos de reproducción se da en los elasmobranquios, en ellos puede haber oviparismo, ovoviviparismo o viviparismo aplacentario, oofagia, embriofagia y viviparismo placentario.
El dimorfismo sexual puede ser permanente (por ejemplo la coloración y tamaño en los lábridos) o tener lugar sólo durante el periodo de reproducción.
Un macho terminal de falso abadejo Epinephelus costae con la cabeza negra con motivo de la reproducción.
Los machos de Tripterygion delaisi cambian de color durante el periodo de reproducción. En la imagen un macho fecundando los huevos.
MÁS INFORMACIÓN
BIBLIOGRAFÍA
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PÁGINAS WEB
- http://www.fishbase.org/search.php